La revolución del bienestar: Un negocio de trillones que no deja de crecer

Qué curioso, mientras redacto este artículo estoy escuchando música zen en Spotify. Y no es casualidad. La industria del bienestar no es solo una moda pasajera; se ha transformado en una verdadera fuerza económica a nivel global. De acuerdo con Bloomberg, este sector alcanzó la impresionante cifra de 6,3 billones de dólares en 2023, un 26% más que en 2019. Estos números posicionan al bienestar como una industria que ya es cuatro veces más grande que la farmacéutica. Pero, ¿qué está impulsando este crecimiento explosivo y cuál es el futuro que nos espera?

 

Bienestar: De moda a estilo de vida permanente

El bienestar ha dejado de ser un lujo reservado para algunos pocos para convertirse en una prioridad para millones de personas alrededor del mundo. Esto se debe, en gran parte, al impacto que tuvo la pandemia de COVID-19, la cual puso el foco en la importancia de la salud física y mental. Hoy en día, el bienestar abarca desde el turismo de salud y el cuidado personal, hasta la nutrición y la salud mental. Este enfoque integral es lo que está impulsando la industria a crecer a un ritmo impresionante del 7,3% anual, con una proyección de llegar a los 9 billones de dólares en 2028.

La definición del bienestar por parte del Global Wellness Institute va mucho más allá de lo que podríamos imaginar. En palabras de Katherine Johnston, investigadora del GWI, en declaraciones a Bloomberg: “En un mundo lleno de incertidumbre y división, el bienestar se ha convertido en un valor universal”. Y es cierto. Cada vez más empresas y consumidores han adoptado el concepto del bienestar como parte de sus valores personales y profesionales. Este cambio de mentalidad ha generado una demanda creciente por servicios y productos que nos ayuden a sentirnos mejor.

 

Los segmentos que están llevando al bienestar al próximo nivel

En términos de facturación, el segmento más grande del bienestar en 2023 fue el de Cuidado Personal y Belleza, alcanzando 1,2 billones de dólares. Este éxito no es casualidad: productos como cremas faciales, spas y servicios de autocuidado están siendo promovidos como parte esencial del “autocuidado”. Le siguen la Nutrición y la Alimentación Saludable, con 1,09 billones de dólares, y la Actividad Física, con 1,06 billones. Todos estos segmentos han demostrado una impresionante capacidad de atracción para consumidores que buscan mejorar su calidad de vida.

Uno de los segmentos de mayor crecimiento en los últimos años ha sido el de los Bienes Inmuebles de Bienestar, con una tasa de crecimiento anual del 18,1%. Este segmento incluye desde edificios residenciales hasta oficinas que priorizan la salud de las personas que los habitan, por ejemplo, a través de sistemas de filtración de aire y espacios que promueven la actividad física. La idea de que el entorno en el que vivimos puede influir directamente en nuestra salud está ganando terreno, y cada vez más desarrolladores inmobiliarios están capitalizando esta tendencia.

 

El bienestar como motor económico global

América del Norte, Asia-Pacífico y Europa lideran el mercado mundial del bienestar, con un valor combinado de 5,8 billones de dólares. Estos tres mercados representan el 90% del valor total del sector, lo cual muestra cómo estas regiones están marcando la pauta en cuanto a consumo y adopción de productos y servicios orientados al bienestar.

Más allá del consumo individual, el bienestar se está convirtiendo también en una prioridad para las empresas. Ya sea a través de programas de bienestar corporativo para empleados, como gimnasios y clases de yoga, o mediante la inclusión de sistemas de salud en sus entornos laborales, muchas empresas están reconociendo que invertir en el bienestar de sus empleados no solo mejora la calidad de vida, sino también la productividad.

Bienestar: Una necesidad real

Según Bloomberg, Rebecca Parekh, CEO y cofundadora de The Well, dijo en una entrevista: “El bienestar es una necesidad muy real”. Atrás quedaron los días en los que el bienestar era percibido como algo superficial o incluso elitista. Hoy, cuidar de nuestra salud mental, física y emocional se ha vuelto fundamental para poder enfrentar los desafíos que nos impone la vida moderna. Y las empresas que logran entender y satisfacer esta necesidad están preparadas para beneficiarse de un mercado que no deja de crecer.

Según las previsiones del Global Wellness Institute, la industria del bienestar podría alcanzar los 6,8 billones de dólares para fines de 2024, y los 9 billones para 2028. Estos números subrayan el potencial inmenso que tiene este sector para seguir marcando tendencia y cambiando la forma en la que vivimos, trabajamos y nos relacionamos con nuestro entorno. Claramente, el bienestar ya no es un lujo; es una parte esencial de nuestras vidas y de la economía global.